La ola de violencia e inseguridad que vive Ecuador en las últimas semanas ha golpeado duramente al sector de la construcción, tanto pública como privada, advierte Sigifredo Aldás Yépez, Presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Pichincha.
Aldás afirma que la delincuencia y el terrorismo han paralizado obras, provocado el abandono de proyectos y desalentado nuevas inversiones. “Hoy estamos afectados como ciudadanos y como sector de la construcción”, lamenta.
Explica que la planificación de cualquier proyecto contempla un análisis de factibilidad económica y seguridad jurídica. Pero el alto riesgo país y la inseguridad ciudadana actual hacen inviables muchas iniciativas.
Además, la extorsión a constructoras es un problema grave. “No se diga en este momento cuando es un proyecto particular, porque tiene que planificarlo y ver si es factible enfrentarlo”, advierte Aldás.
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La delincuencia también ha generado pérdidas de maquinaria y equipos. Esto obliga a las empresas a destinar más recursos a seguridad privada, encareciendo los costos.
Ante este panorama, el gremio de la construcción está dispuesto a colaborar con las autoridades para atacar la raíz del problema. Si bien la reactivación económica es necesaria, Aldás considera prioritario recuperar la seguridad ciudadana.
“Debemos sacrificarnos por nuestro país. Nuestros proyectos tienen que seguir, pero no podemos dejar de trabajar”, concluye.
Fuente: Portadas | prensa.ec
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