El 2 de junio de 1953, la Reina Isabel II fue coronada formalmente en la Abadía de Westminster, en Londres. Esta ceremonia, cargada de esplendor y simbolismo, no solo marcó el inicio de un reinado histórico que se extendería por siete décadas, sino que también fue un hito mediático, siendo la primera coronación transmitida íntegramente por televisión. La audiencia global que siguió el evento alcanzó millones de personas, reflejando el interés y la fascinación mundial por la monarquía británica.
Antecedentes de una Reina
Isabel II nació el 21 de abril de 1926 en Londres, como la hija mayor del entonces duque de York, quien posteriormente se convertiría en el rey Jorge VI. Durante su juventud, Isabel desempeñó un papel activo durante la Segunda Guerra Mundial, participando en programas de radio para animar a los niños refugiados y sirviendo en una rama femenina del ejército dedicada a tareas de enfermería y mecánica.
La Ascensión al Trono
El 6 de febrero de 1952, tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, Isabel asumió el trono con solo 25 años, convirtiéndose en la nueva Reina del Reino Unido y jefa de la Commonwealth. Aunque su ascensión fue inmediata, la ceremonia de coronación fue programada para 16 meses después, el 2 de junio de 1953, permitiendo así una preparación meticulosa para el evento.
Preparativos Meticulosos
Desde el momento en que Isabel ascendió al trono, comenzaron los preparativos para su coronación. La Comisión de la Coronación anunció en junio de 1952 que la ceremonia se celebraría un año más tarde. La Abadía de Westminster fue el lugar elegido, coincidiendo la fecha con el aniversario de la coronación de su padre en 1937. Se realizaron arreglos detallados para asegurar que cada aspecto del evento reflejara la grandeza y la tradición de la monarquía británica.
La Procesión: Un Espectáculo de Esplendor
La coronación comenzó con una procesión majestuosa desde el Palacio de Buckingham hasta la Abadía de Westminster. Miles de espectadores acamparon durante la noche para asegurar un lugar privilegiado desde donde ver el desfile. Encabezando la procesión, bandas militares y contingentes de las fuerzas armadas de la Commonwealth marcharon solemnemente, seguidos por carrozas que transportaban a dignatarios y miembros de la realeza. Isabel II, en la imponente carroza real de oro, estaba rodeada por sus damas de honor y nobles del Reino Unido.
Una Ceremonia Solemne
Dentro de la Abadía de Westminster, la ceremonia comenzó con una misa solemne oficiada por el Arzobispo de Canterbury. La Reina Isabel II prestó el Juramento a la Corona, comprometiéndose a mantener la justicia y las leyes de sus dominios y a defender la fe. Tras la misa, la Reina fue coronada con la Corona Imperial del Estado, una pieza magnífica adornada con más de 1.300 diamantes y casi 170 perlas.
Un Legado Duradero
La coronación de Isabel II no solo marcó el inicio de su prolongado reinado, sino que también representó un momento de transición significativa en la historia del Reino Unido. Isabel II fue la primera soberana en ascender al trono mientras se encontraba en el extranjero, en Kenia, durante una gira de la Commonwealth. Su reinado se ha caracterizado por una notable capacidad de adaptación a los cambios sociales y políticos, así como por su firme compromiso con la monarquía constitucional.
Impacto Global
La transmisión televisiva de la coronación fue un hito en la historia de los medios, permitiendo que 27 millones de personas en el Reino Unido y millones más alrededor del mundo pudieran ser testigos del evento. La cobertura mediática global consolidó el estatus de la Reina Isabel II como una figura de relevancia internacional desde el inicio de su reinado.
Datos Relevantes
- Primera coronación televisada: 27 millones de espectadores en el Reino Unido.
- Procesión histórica: Miles de espectadores presentes en las calles de Londres.
- Abadía de Westminster: Lugar de coronaciones desde 1066.
- Corona Imperial del Estado: Adornada con más de 1.300 diamantes y 170 perlas.
- Vestido de coronación: Diseñado por Norman Hartnell, con emblemas de la Commonwealth.
La coronación de Isabel II del Reino Unido fue un acontecimiento histórico lleno de esplendor y simbolismo que marcó el inicio de un reinado extraordinario. Como la primera coronación televisada, tuvo un impacto mediático global y dejó un legado duradero en la historia de la monarquía británica. La capacidad de la Reina para adaptarse a los tiempos cambiantes y su compromiso inquebrantable con su papel han sido fundamentales para su longevidad en el trono.
Fuente: Prensa.ec
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