En 1838, México y Francia se vieron envueltos en un conflicto que pasaría a la historia como la “guerra de los pasteles”. Aunque su nombre pueda evocar imágenes de repostería, este enfrentamiento fue mucho más que eso, marcando el inicio de la Primera Intervención Francesa en México. ¿Cuáles fueron las verdaderas causas de este curioso conflicto y qué consecuencias tuvo para ambas naciones? Acompáñanos a descubrirlo.
La llamada “guerra de los pasteles” no fue solo un enfrentamiento por la deuda de unos bollos, sino el resultado de tensiones políticas y comerciales entre México y Francia. En 1832, un pastelero francés en Tacubaya se convirtió en el catalizador involuntario de este conflicto al denunciar a militares mexicanos que no pagaron por sus productos. Sin embargo, las raíces del problema se remontaban mucho más atrás, a las disputas comerciales y diplomáticas entre ambos países.
El descontento francés con el gobierno mexicano se había gestado durante años, especialmente debido a la negativa de México a conceder privilegios comerciales a Francia y otros países que no reconocían su independencia. Además, eventos como el bloqueo de puertos en Sudamérica por parte de Francia en 1837 exacerbaron las tensiones, demostrando la determinación del país europeo en expandir su influencia en la región.
La situación llegó a un punto crítico en 1838, cuando el gobierno francés, frustrado por la falta de progreso en las negociaciones comerciales con México, decidió tomar medidas más drásticas. El barón Deffaudis, representante francés en México, se retiró de las negociaciones y regresó con una flota de guerra, amenazando con invadir territorio mexicano si no se cumplían sus demandas.
A pesar de los esfuerzos diplomáticos, el conflicto se intensificó y culminó en un bloqueo marítimo de los puertos mexicanos y, finalmente, en una invasión francesa a Veracruz en diciembre de 1838. Aunque México intentó resistir, la superioridad militar francesa resultó abrumadora, obligando a México a pagar la indemnización exigida por Francia.
Sin embargo, las consecuencias de la “guerra de los pasteles” no terminaron ahí. Aunque se firmó un acuerdo de paz con la mediación de Gran Bretaña, la deuda exigida por Francia nunca se pagó por completo. Este incumplimiento posteriormente sería utilizado por Francia como pretexto para una segunda intervención militar en México en 1861, marcando otro capítulo turbulento en la historia de ambas naciones.
- La “guerra de los pasteles” fue el resultado de tensiones políticas y comerciales entre México y Francia en la década de 1830.
- Aunque comenzó con la disputa sobre el impago de unos bollos, las verdaderas causas del conflicto residían en las ambiciones comerciales de Francia en América Latina y la negativa de México a ceder a sus demandas.
Fuente: Prensa.ec
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