El virus de Nipah, un patógeno zoonótico con la capacidad de pasar de animales a humanos, ha emergido como una amenaza significativa para la salud pública global. A pesar de su limitada prevalencia en brotes documentados, su alto grado de mortalidad y la amplia gama de animales huéspedes lo convierten en un problema preocupante.
Brotes Anteriores
El virus de Nipah, identificado por primera vez en Malasia en 1999 durante un brote entre criadores de cerdos, ha demostrado su capacidad para causar estragos en comunidades enteras. Desde entonces, no se han registrado nuevos brotes en la zona, pero Bangladesh e India han experimentado brotes casi anuales desde el 2001, generando inquietud en la región.
Adicionalmente, pruebas serológicas han demostrado la presencia del virus en diversas especies de murciélagos en países como Camboya, Ghana, Filipinas, Indonesia, Madagascar y Tailandia, lo que sugiere un riesgo latente de infección en varias regiones del mundo.
Modos de Transmisión
La transmisión del virus de Nipah ha variado en brotes anteriores. En los primeros brotes de Malasia y Singapur, la infección humana se debió principalmente al contacto directo con cerdos enfermos o sus secreciones, a través de gotículas respiratorias o contacto con tejidos de cerdos.
En Bangladesh e India, la fuente más probable de infección fue el consumo de frutas o productos de frutas contaminados con orina o saliva de murciélagos infectados. Además, se ha reportado una transmisión limitada de persona a persona en brotes posteriores.
Signos y Síntomas
La infección por el virus de Nipah puede ser asintomática o causar una variedad de síntomas, desde síntomas gripales iniciales hasta encefalitis letal. La tasa de letalidad varía, pero puede ser tan alta como el 75%. Aquellos que sobreviven pueden experimentar secuelas neurológicas.
Diagnóstico y Tratamiento
El diagnóstico de la infección por el virus de Nipah puede ser complicado debido a síntomas inespecíficos. Las pruebas de laboratorio, como la PCR en tiempo real y la detección de anticuerpos, son esenciales para confirmar la infección.
Hasta la fecha, no existen medicamentos específicos ni vacunas para el virus de Nipah, lo que resalta la urgente necesidad de investigación en este campo. El tratamiento se centra en el manejo de las complicaciones respiratorias y neurológicas.
Huésped Natural y Animales Domésticos
Los murciélagos frugívoros, en particular las especies del género Pteropus, se consideran el huésped natural del virus de Nipah. Además, se han notificado brotes en cerdos y otros animales domésticos.
Prevención
La prevención se basa en la concienciación sobre los factores de riesgo y la educación sobre medidas preventivas. Esto incluye reducir el acceso de murciélagos a fuentes de alimentos humanos, usar protección al manipular animales enfermos y practicar una higiene rigurosa.
Además, es esencial establecer un sistema de vigilancia de la salud animal y humana para detectar rápidamente nuevos casos y responder de manera efectiva.
Respuesta de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) brinda orientación técnica y apoyo a países afectados para gestionar brotes de Nipah y prevenir su propagación.
En conclusión, el virus de Nipah, aunque raro en comparación con otros patógenos, sigue siendo una amenaza real. La falta de tratamiento específico y vacunas subraya la importancia de la vigilancia continua y la investigación para controlar y prevenir futuros brotes de este virus mortal.
Fuente: OMS | prensa.ec