La sabiduría y la inteligencia son claves para el desarrollo sostenible de Ecuador en 2024. El país necesita un liderazgo que sepa qué no hacer.
Ecuador se encuentra en un punto crucial de su historia. Con un nuevo presidente al mando, el país necesita más que nunca líderes inteligentes y sabios. Pero, ¿qué significa realmente ser sabio en este contexto?
La sabiduría, en este caso, no se trata solo de tener conocimientos o habilidades. Se trata de saber qué no hacer. De aprender de los errores del pasado y evitar repetirlos. Casi los 17 o 18 millones de ecuatorianos estamos seguros de lo que ya no queremos: el trabajador del día a día, el empresario, el dueño del negocio, la familia, los jóvenes.
El año 2024 se perfila como un año de crecimiento limitado, establecido en parámetros de fenómenos naturales que pueden impactar directamente a la economía. Sin embargo, es crucial que el país se focalice en estos 17 meses en una senda que le permita al nuevo gobierno del 2025 generar lo que necesitamos: sostenibilidad a través del tiempo y un crecimiento real.
Un crecimiento real no es el que hemos venido manejando durante los últimos años después del año 2000. Es un crecimiento que beneficia a todos los ecuatorianos, no solo a unos pocos.
En conclusión, el nuevo presidente debe tener la sabiduría para saber qué no debe repetir y qué camino no debe recorrer. Solo así podremos lograr un Ecuador próspero y sostenible.
Fuente: Christian Idrovo Wilson
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— PrensaEc (@PrensaEc1) September 22, 2023
