La formación dual es un enfoque educativo que combina la formación teórica en el aula con la formación práctica en el lugar de trabajo. Este modelo tiene varios beneficios tanto para los estudiantes como para las empresas.
Aquí hay algunos de los beneficios de la formación dual:
- Integración teoría y práctica: La formación dual permite a los estudiantes aplicar directamente los conocimientos teóricos adquiridos en el aula a situaciones del mundo real en el entorno laboral. Esto fortalece la comprensión de los conceptos y facilita la transición del aprendizaje a la aplicación práctica.
- Relevancia laboral: Al vincularse en las industrias durante su formación, los estudiantes van siendo parte de la cultura organizacional, se involucran en los equipos de trabajo y demás aspectos que son parte de la vida laboral, esto desarrolla habilidades blandas importantes en los futuros profesionales y, para las empresas se convierte en el factor diferenciador que les hace apostar por formación dual, como una estrategia para conseguir perfiles ajustados a sus necesidades
- Experiencia laboral temprana: La formación dual proporciona a los estudiantes la oportunidad de ganar experiencia laboral desde el principio de su educación, brindando habilidades competitivas frente a otras formas de estudio además fomenta las perspectivas de empleo una vez que hayan completado su formación incluso antes
- Mayor empleabilidad: Los graduados de programas de formación dual suelen ser más atractivos para los empleadores, ya que han adquirido habilidades prácticas y experiencia laboral relevante durante su educación. De la experiencia hasta el momento el 90% de los estudiantes se queda trabajando en su empresa formadora, por lo que podemos decir que las empresas que participan ven a la formación dual como una estrategia de reclutamiento de talento humano cualificado.
- Colaboración con la industria: La formación dual fomenta una estrecha colaboración entre las instituciones educativas y las empresas. Esta colaboración beneficia a ambas partes, ya que las empresas pueden contribuir al diseño del currículo, asegurando que los estudiantes adquieran las habilidades necesarias para el mundo laboral, además se propicia la innovación e investigación a través de los proyectos empresariales que se encaminan en cada periodo.
- Desarrollo de habilidades sociales y profesionales: La interacción con profesionales en el lugar de trabajo permite a los estudiantes desarrollar habilidades sociales y profesionales, como la comunicación efectiva, el trabajo en equipo y la resolución de problemas en un entorno empresarial real.
- Red de contactos: Al trabajar en un entorno empresarial, los estudiantes tienen la oportunidad de establecer contactos y construir relaciones profesionales valiosas. Estas conexiones pueden ser beneficiosas para su futura carrera y proporcionar mayores oportunidades de empleo.
- Flexibilidad y adaptabilidad: La formación dual desarrolla la capacidad de los estudiantes para adaptarse a diferentes entornos y situaciones laborales, lo que los hace más flexibles y capaces de enfrentar los desafíos cambiantes en el mundo laboral.
En resumen, la formación dual ofrece una combinación única de teoría y experiencia práctica, preparando a los estudiantes de manera más efectiva para el mundo laboral y beneficiando a las empresas al proporcionarles colaboradores mejor capacitados y listos para contribuir desde el primer día.
Fuente: María Rosa Polit / KAIZEN MC
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